Perdón?

La Iglesia, aunque formada en su parte visible por miembros sujetos al error, es santa e indefectible. Por eso, si no se pueden atribuir los errores de un individuo a la institución a la cual pertenece, mucho menos se puede hacer esto con una institución divina, como lo es la Iglesia Católica.
Algunos atolondrados no se han informado bien sobre las angelicales costumbres de los pueblos originarios que sacrificaron el año del descubrimiento 250.000 seres humanos a sus ídolos en Tenochtitlan y sobre la obra que fue realizada en el vasto territorio americano. Apenas 50 años después del descubrimiento ya había universidades en América. Por eso es muy importante aclarar los beneficios globales de esta colosal obra evangelizadora como la elogiaron a lo largo de los siglos las voces más autorizadas de la Iglesia.
La práctica del canibalismo era habitual, según Hernán Cortés en sus cartas al emperador Carlos V, los aztecas solían llevar sal a las batallas para conservar a los enemigos muertos y compartirlos con sus amigos, “los abren vivos por los pechos y les sacan el corazón y las entrañas y queman las dichas entrañas y corazones delante de los ídolos ofreciéndoles en sacrificio aquel humo”
A los caribes se les considera la tribu caníbal más grande de Sudamérica. De hecho, la palabra caníbal viene de la palabra “caríbal” utilizada por los españoles para referirse a los miembros de esta etnia como gente fuerte que quitaba la carne de sus enemigos.
Por eso Urogario Barjuda, que no duda en introducir error en el mundo, por obediencia a su tio, cada que puede repite que:
Se han cometido muchos y graves pecados contra los pueblos originarios de américa en Nombre de dios. pido humildemente perdón, No Sólo por las ofensas de la propia iglesia Sino por los crímenes contra los pueblos originarios Durante la llamada conquista de américa.
Desconociendo que Los Papas no callaron delante las injusticias. Condenaron bajo pena de excomunión a los que esclavizaron los pueblos conquistados en América y aun más, fue la iglesia católica la que defendió a los naturales, que a propósito NO son originarios de América y que eran maltratados por protestantes y fue la reina católica quien les hizo defender.
El objetivo de la evangelización de América fue llevar la vida divina a los paganos y tratarlos como a hijos de Dios, el intercambio cultural mas grande de la historia.
A Urogario no le gusta que leamos historia y sepamos por ejemplo sobre Andrés De Tapia, un soldado español que acompañó a Cortés en la conquista de México en 1521, quien reveló que había contado decenas de miles de cráneos en lo que se conoció como el Huey Tzompantli, el altar más importante de los aztecas, recién desenterrado en el centro de ciudad de México, por arqueólogos del Instituto Nacional de Antropología e Historia. Donde ponían los cráneos de las victimas de sacrificios humanos.
Por allá en 1487, la Gran Pirámide de Tenochtitlan terminó de construirse. Hubo una gran celebración para inaugurar el “templo”, sacrificaron, según los propios Aztecas, 84.000 personas durante un período de 4 días, se estima que un promedio de 250.000 personas eran sacrificadas anualmente.
¿De haber suspendido esta dulce practica es de lo que se queja Urogario? Cabría preguntarse.
La Inquisición no tenía jurisdicción sobre los indios, tenía expresamente prohibido tratar con los naturales, en cambio la iglesia procuraba su evangelización, en vista de la sed de Dios de demostraban los Americanos, después de siglos de sojuzgamiento por las castas de chamanes asesinos, violadores, Caníbales y adoradores de la Santa muerte, sacrificios humanos y sed de sangre.